1. Super Mario Bros. (1985):

Este clásico de Nintendo sentó las bases del género de plataformas. Con su jugabilidad adictiva, niveles llenos de color y la inolvidable música de Koji Kondo, Mario y Luigi se convirtieron en íconos mundiales.
2. The Legend of Zelda: Ocarina of Time (1998):

Considerado por muchos como el mejor juego de todos los tiempos, Ocarina of Time revolucionó los juegos de acción-aventura. Su mundo abierto, su historia épica y su banda sonora magistral lo convirtieron en un referente para la industria.
3. Final Fantasy VII (1997):

Este RPG de Square Enix marcó un antes y un después en el género. Sus personajes carismáticos, su trama conmovedora y sus batallas por turnos estratégicas lo convirtieron en un fenómeno cultural.
4. Doom (1993):

Doom fue un hito en el género de los shooters en primera persona. Su frenético ritmo, sus gráficos revolucionarios para la época y su atmósfera oscura lo convirtieron en un clásico instantáneo.
5. Pac-Man (1980):

Aunque parezca simple, Pac-Man es uno de los videojuegos más influyentes de la historia. Su adictiva mecánica de comer puntos y escapar de los fantasmas lo convirtió en un fenómeno mundial y un icono de la cultura pop.